Ven, sientate, tengo algo que contarte ...
El principio de temporada no está siendo ni tanto, ni tan poco como tu crees, la verdad.
Estás disfrutando con los entrenamientos, mucho, de ahí te vienen las satisfacciones, de las carreras... , ni las unas lo son tanto, ni las otras tan poco, es más, sabias que habría tanto de las unas, como de las otras...
Cuando cruzas la línea de meta y todo ha salido bien, a veces hasta levantas los brazos, toda esa sensación de plenitud dura tan poco como el instante que tardas en bajarlos de nuevo y cruzar esta misma. En cambio, cuando todo sale mal, a nadie le importa la agónica desilusión precedida por un camino no menos largo que injusto...
Todo ésto es tan efímero como el tiempo que dure en tu cabeza, la misma que podrá hacerte vencer cuando el dolor de piernas te limite, la misma que te planteará otras limitaciones, pero tranquilo tampoco élla decide, entonces estará tú corazón.
Palabras que ayer dije a un amigo, palabras que ayer me dijo un amigo del alma.